¿Tienes claro cómo crear tu web y qué contenidos son los más apropiados? Si tienes ya una estrategia de diseño y contenido web que te funciona, enhorabuena. Si no es así o quieres explorar nuevas formas de aumentar la presencia y la visibilidad web, sigue leyendo este artículo.
Continente y contenido
Es importante considerar la web como un todo, donde lo que se publica es tan importante como la forma de hacerlo. Puede parecer sorprendente, pero el diseño web es fundamental porque afecta de muchas maneras a tus objetivos. Por ejemplo, hay errores de código que impiden finalizar una compra, fallos de seguridad que comprometen datos confidenciales o una baja usabilidad que desespera a los visitantes y hace que abandonen la web.
Por lo tanto, antes de decidir qué contenidos publicar, lo primero es escoger una plataforma segura para crear la web. Te resumimos unos aspectos clave para elegir la más idónea:
- Gran soporte y atención al cliente
- Edición sencilla para los usuarios
- Actualizaciones seguras
- Opción de escalabilidad
- Adaptabilidad a distintos formatos
- Plantillas diversas
Marketing de contenidos
El marketing de contenidos es esencial en la actualidad. Como hay tantas publicaciones, el listón está muy alto. Los internautas reciben muchos estímulos y apenas dedican unos segundos a ojear una web antes de decidir si siguen en ella o buscan algo más interesante.
- El 47 % de los compradores revisa 3-5 publicaciones antes de decidirse por una marca.
- El vídeo es el formato más utilizado.
- El 82 % de los profesionales del marketing publica contenidos.
- El objetivo principal es el conocimiento de marca.
- La web es el tercer canal de contenidos (34,8 %), después de las redes (44,9 %) y del correo electrónico (35 %).
Contenidos para cada tipo de web
Hay muchos tipos de publicaciones que favorecen la presencia, visibilidad y posicionamiento orgánico de la web. En primer lugar, es importante conocer el público objetivo para saber lo que busca. En segundo lugar, el tipo de web determina la clase de contenido.
En las webs corporativas, todo lo relacionado con los productos encaja muy bien. Por ejemplo, si tienes una tienda de ropa, publica fotos y vídeos de clientes con ropa que han comprado en tu tienda, así como posts con ideas para crear conjuntos y mostrar tendencias. Si vendes maquinaria, los tutoriales sobre el funcionamiento y el mantenimiento son siempre bienvenidos. Si te dedicas a los servicios, presenta casos prácticos, explica conceptos o muestra las ventajas y los beneficios de distintas actividades, siempre de manera informativa.
En los blogs personales, céntrate en una sola temática y crea distintos formatos para atraer visitantes. En los de viajes, las fotos y los vídeos hablan por sí solos. En los de moda, da ideas y luce conjuntos. En los de lectura o de cine, haz reseñas para incentivar a tus visitantes a leer o ver películas. El pódcast es un formato que está ganando adeptos por momentos, ya que puede escucharse con auriculares mientras se va de aquí para allá.
Diseño web adecuado
El formato depende, además del público objetivo y del tipo de web, del diseño del sitio. Si decides subir contenidos pesados, como vídeo o texto con muchas imágenes, la página web ha de cargar rápidamente. De otro modo, el usuario se irá y no volverá más. La web tiene que adaptarse también a los dispositivos móviles, que son el medio principal para navegar por internet. De este modo, garantizas que todo se vea como debería.
Comprueba siempre las analíticas del sitio web: son fundamentales para saber si tu estrategia de diseño y contenidos es la ideal. Revisa la tasa de rebote, el tiempo de permanencia, el número de visitantes únicos, las páginas visitadas, las interacciones, el origen de la visita, etc. Descubre qué funciona y qué no. Si algo falla, averigua por qué. Puede haber múltiples factores. También es muy útil visitar la web como usuario en distintos dispositivos (ordenador de sobremesa, portátil, tablet o móvil).Planifica los contenidos, opta por el diseño web adecuado y adapta la estrategia si es necesario para cumplir tus objetivos.
